Esta semana el Doctor González escribe en Diario AS sobre el infarto sufrido por Iker Casillas y su recuperación.
Cuando hablamos de una urgencia médica como la que ha sufrido el futbolista, el tiempo es una variable fundamental, tanto para salvar la vida como para reducir las posibles secuelas. Y en el caso de Casillas, la inmediata actuación del servicio médico del Oporto ha sido sobresaliente, sin dudar sobre dónde ni cuándo trasladar al jugador. Y más tratándose de un caso tan extremadamente inusual en el deporte y en el fútbol en particular. Siendo realmente complicado encontrar un caso similar en la literatura médica.
Un infarto de miocardio consiste en la obstrucción repentina de una o varias arterias que irrigan el músculo cardíaco. Cuanto más tiempo vuelva a recibir sangre el músculo afectado, más células de tejido muscular miocárdico morirán. Y al cabo de más de dos horas, esta muerte celular es irreversible, dañando de este modo el músculo cardíaco y pudiendo alterar su funcionalidad.
El tratamiento habitual en estos casos es la colocación de uno o varios stents en la zona afectada para promover la revascularicación. Si el tiempo de actuación es rápido, como ha sucedido en el caso de Casillas, lo normal es que no haya lesiones importantes a nivel del músculo cardíaco, por lo que su funcionalidad no se verá resentida, pudiendo hacer una vida completamente normal, incluido en el ámbito deportivo.
Eso sí, es importante ser cautos, ya que la ausencia de daño no existe en estos casos. El periodo de recuperación estará entre uno y dos meses, al cabo de los cuales deberán realizarse pruebas funcionales y fisiológicas para ver el estado y funcionalidad del corazón del jugador.
En cuanto a la incógnita deportiva, el Dr. González considera que la decisión es bastante probable que se incline hacia el cese de su carrera ya que, aunque su corazón funcione perfectamente, es un riesgo que, tras tanto éxitos y habiendo demostrado ya sobradamente su valía como deportista, es posible que Iker no quiera asumir.
Consulta el artículo en el Diario AS: La importancia de un tratamiento inmediato
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