Si algo he aprendido a lo largo de mi vida profesional, en lo referente a las lesiones deportivas, es que uno tiene que ser humilde a la hora de hablar de tratamientos y mecanismos de prevención de las lesiones. No hay que sacar pecho el año que tu equipo queda campeón de cómo hay que tratar las lesiones para que se recuperen pronto ni cuáles son los mejores métodos de prevención. Ya que al año siguiente, sin saber muy bien cómo ni por qué, tienes a la misma plantilla plagada de lesiones. Ahora le ha tocado al Barcelona analizar el porqué de tantas lesiones musculares.

Los mismos jugadores Iniesta y Puyol se preguntan qué está pasando. Y efectivamente algo debe de haber cambiado en su planificación para que exista esa sobrecarga. Contra el Atlético, vimos un Barça espeso, con menos velocidad, sin anticipación y con menor potencia de salto. Hemos dicho muchas veces que el potencial físico de un equipo se basa en el difícil equilibrio entrenamiento-descanso. A estas alturas, el nivel físico se adquiere en los partidos, no en intensos entrenamientos. Definitivamente, tantas lesiones musculares a la vez no es una cuestión de casualidad.